27/12/2024
Dark Souls II nos presenta al Portador de la Maldición, un personaje enigmático y silencioso que se convierte en el protagonista de esta épica aventura. A diferencia de otros juegos, donde el héroe tiene una historia clara y definida, el jugador asume el rol de un no-muerto con amnesia, arrastrado por una fuerza irresistible hacia el reino de Drangleic en busca de una cura para la maldición que lo consume.
La Maldición y el Camino a Drangleic
El Portador de la Maldición no es un personaje con una apariencia fija. Su aspecto, atributos, sexo, origen y clase inicial son definidos por el jugador, otorgándole una personalización sin precedentes. Su personalidad se caracteriza por un silencio constante, un protagonista silencioso que solo emite sonidos guturales en situaciones de dolor o muerte.
La historia comienza con el Portador de la Maldición ya afectado por la maldición de la no-muerte. Sin recuerdos de su pasado, siente una profunda necesidad de romper la maldición que lo consume. Guiado por una Portadora de la Llama, llega a Drangleic, un reino amurallado donde se rumorea existe una cura para la no-muerte. En este largo viaje, el jugador deberá enfrentar múltiples desafíos.
El Misterio de los Cuatro Grandes Seres
Tras un encuentro con la Portadora de la Llama, el Portador de la Maldición es dirigido a la búsqueda del Rey Vendrick, pero se le advierte que su alma está demasiado pálida. Para fortalecerse, el protagonista debe encontrar y derrotar a los Cuatro Grandes Seres, entidades de gran poder y misterio. Cada uno de ellos representa un desafío único y repleto de peligros:
- El Viejo Rey de Hierro: Un rey cuya arrogancia lo llevó a la muerte en un mar de hierro fundido. Su alma se encuentra en las profundidades de su antiguo dominio.
- La Pecadora Perdida: Encarcelada por intentar reencender la Primera Llama, su alma se encuentra en lo más profundo de la Bastilla Perdida.
- El Podrido: Un horrendo ser formado por una amalgama de cadáveres que se esconde en las cloacas de Majula, La Alcantarilla.
- La Querida Freja del Duque: Una enorme araña que gobernó la ciudad de Brightstone Cove Tseldora. Su derrota revela el último Gran Alma.
La derrota de estos seres otorga al Portador de la Maldición un poder inmenso, necesario para continuar su viaje.
El Castillo de Drangleic y el Túmulo de los No-Muertos
Con el poder de los Cuatro Grandes Seres, el Portador de la Maldición llega al Castillo de Drangleic, la fortaleza del Rey Vendrick. Sin embargo, en lugar del Rey, el personaje se encuentra con su Reina, Nashandra. Ella revela la verdad sobre Vendrick y lo dirige al Túmulo de los No-Muertos.
En el Túmulo de los No-Muertos, un lugar antiguo donde yacen hombres y dioses, el Portador de la Maldición enfrenta a Velstadt, el Escudo Real, y finalmente a Vendrick, quien se encuentra reducido a un estado de hollín. La decisión de acabar con su sufrimiento o dejarlo vagar eternamente queda en manos del jugador.
Las Tres Coronas y el Corazón de Niebla Cenicienta
El viaje no termina aquí. El Portador de la Maldición debe encontrar las Tres Coronas de poder pertenecientes a reyes caídos, obteniendo el poder para combatir la maldición que lo consume. Estas coronas se encuentran en:
- Shulva, Sanctum City (Corona del Rey Hundido).
- El Antiguo Reino de Hierro (Corona del Viejo Rey de Hierro).
- Eleum Loyce Congelado (Corona del Rey de Marfil).
El Corazón de Niebla Cenicienta, obtenido del Dragón Antiguo, permite al Portador de la Maldición acceder a los recuerdos de seres extintos, ofreciendo información crucial para su búsqueda.
El Trono del Deseo y el Enfrentamiento Final
Debajo del Castillo de Drangleic se encuentra el Trono del Deseo. Allí, la Portadora de la Llama declara el fin del viaje del Portador de la Maldición, pero advierte sobre Nashandra, quien ansía el poder de la Primera Llama. El enfrentamiento final contra Nashandra, una hija del Abismo, determinará el destino del Portador de la Maldición.
El Legado del Portador de la Maldición: Dos Caminos, Dos Destinos
El final del juego ofrece dos posibles desenlaces para el Portador de la Maldición :
- Asumir el Trono: El Portador de la Maldición acepta su papel en el ciclo del entorno, ascendiendo al trono y decidiendo el destino de la Primera Llama. ¿Se sacrificará para mantenerla encendida o permitirá que se extinga?
- Abandonar el Trono: El Portador de la Maldición rechaza el trono y se aleja, buscando una forma definitiva de romper la maldición que lo persigue.
El Portador de la Maldición, un personaje misterioso y poderoso, deja una huella imborrable en el entorno de Dark Souls II. Su viaje, lleno de desafíos y decisiones difíciles, lo convierte en un protagonista inolvidable.
Comparativa entre el Portador de la Maldición y otros Protagonistas de Dark Souls
| Característica | Portador de la Maldición | Elegido no-muerto (Dark Souls I) | El Ceniciento (Dark Souls III) |
|---|---|---|---|
| Origen | No-muerto con amnesia | No-muerto | Ceniciento |
| Objetivo | Romper la maldición | Enlazar la llama | Enlazar la llama |
| Personalidad | Silente, misterioso | Silente, determinado | Silente, solitario |
| Poderes | Adquiridos a lo largo del juego | Adquiridos a lo largo del juego | Adquiridos a lo largo del juego |
| Destino | Doble final (asumir o abandonar el trono) | Enlazar la llama | Varios finales |
Como podemos observar, a pesar de las similitudes, cada protagonista tiene sus propias características y un destino único que lo diferencia del resto, dejando al jugador con una experiencia inigualable.
Consultas Habituales sobre el Portador de la Maldición
Aquí te dejamos algunas de las preguntas que más se realizan sobre este enigmático personaje:
- ¿El Portador de la Maldición encuentra una cura? El juego no ofrece una cura definitiva, sino dos posibilidades: aceptar el trono y continuar el ciclo, o rechazarlo y buscar una solución alternativa.
- ¿Es el Portador de la Maldición el Alma de Ceniza? Si bien existen teorías que lo sugieren, no hay confirmación oficial.
- ¿Cuál es la fortaleza del Portador de la Maldición? Su fortaleza reside en su capacidad de adaptación, aprendizaje y persistencia frente a las adversidades. Además, su poder aumenta considerablemente al obtener las almas de los Cuatro Grandes Seres y las Tres Coronas.
El misterio que rodea al Portador de la Maldición es parte de su encanto. Su historia es la del jugador, y su destino depende de las decisiones que se tomen a lo largo del juego. Su viaje es una experiencia única que deja al jugador reflexionando sobre la naturaleza de la maldición, la vida y la muerte, así como la complejidad de los ciclos que rigen el entorno de Dark Souls II.
Si quieres conocer otros artículos parecidos a El portador de la maldición: un viaje a través de dark souls ii puedes visitar la categoría Curso.